Castigo contraproducente
Después de la noche de Reyes, los juguetes del niño bueno, ardían en la chimenea alimentada por el carbón del niño malo.
Torcuato González Toval
¡¡¡'Cienmanos', el libro, ya está aquí!!!
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Aquí está nuestro hijo *Cienmanos*. Ha llegado reptando con sus cien manos
y sus cien pies para que lo disfrutéis.
*EL VALS DEL TIEMPO*
Un abrazo pa...
Hace 12 años
38 comentarios:
¡Demonio de crío!
Jajajaja.
Salu2, TORCUATO.
Genial, Tor, estás que te sales. La dualidad reflejada a la perfección. Has jugado muy bien con la representación del bien y del mal tanto en personas, como en lo material, premio y castigo. Aplaudo este hiperbreve. Abrazos.
Malo, muy malo ese niño...
Un abrazo
Me gustó mucho. Aunque ganen los malos.
Me gusta mucho el título.
Está claro que los castigos casi siempre producen el efecto contrario al que se pretende.
TOR, el rey de los nanos.
Un beso.
El carbón de la maldad...
Torcuato, un capo. Saludos muchos.
Para algo tiene que utilizarse el carbón.
Muy bueno, Torcuato.
Hacía mucho frío!!!!!!
Qué relato tan simpático, una delicia :)
Caín y Abel.
y el tiempo no coloca a cada uno en su sitio
Y tal como van las cosas, el niño malo volverá a tener mejores regalos el año que viene...
Besicos
Un remake de Caín y Abel???
Besos, Tor.
jeje niños y regalos complementarios
Saludillos
Bordas estos nanos donde los significados contrarios se alteran, chocan y se enfrentan. Excelente.
Abrazos.
Que bueno y que malo, aun tiempo.
Hola y adiós.
(no lo hago tan bien como tú pero lo intento)
¡Qué bueno el micro! Y que malo el niño...
Un saludo.
Sí, no es cosa mía, estás inspirad. Muy ingenioso.
Abrazos.
Me gustan las escenas conciliadoras.
espectacular...definitivamente hay que descargar la ira....muy perverso, a mi estilo oscuro.
Los niños pueden ser muy crueles, a veces demasiado para mi gusto...
Besos mágicos
Bella imagen.
ufffffff,... creo que no hay niños ni buenos, ni malos..., son nuestras malditas miradas clasificadoras...,
y los juguetes no se queman.
Acabas de escribir un micro de TERROR.
Enhorabuena, es muy bueno, pero es te rro ri fi co.
Saludos
Felisa
(llegué tarde para el concurso de microrrelatos, otra vez será)
Ahora sólo decirte que este "Castigo contraproducente" me hizo pensar en el bien y el mal que viven en permanente puja dentro nuestro. Y hay veces que el niño malo nos quema los sueños, los proyectos, las esperanzas, las ganas, pero por suerte el niño bueno tiene algo de terco y al poco tiempo se levanta y otra vez empieza a escribir la cartita a los reyes magos con la ilusión encendida.
Saludos!
me quedo con los niños que ni fu ni fa.
Uhhh pobre niño tanta espera para que el demonio haga de las suyas. Seguramente ese niño no tendrá regalos las próximas fiestas...jajaja
Te mando un abrazo grandes.
Ja ja ja, es que no hay que castigar a los niños malos que lo llevan fatal!!!
Buenísimo Torcuato!
Un beso
PD: ¿no descansas nunca?
Un micro muy negro y no lo digo por el carbón.
Besos.
Todo castigo es contraproducente cuando de niños se trata. Impactante y gráfico nanorelato. Un placer leerte Torcuato. Abrazos.
Buen efecto mariposa. Bien traida esta pequeña globalización doméstica.
Un abrazo
Estoy de acuerdo con el comentario de Elisa. Muy bueno Torcuato.
Un abrazo,
Andri
Yo lo estaba viendo equitativo y todo, pero me decidí por el comenario de Elisa porque es acertado.
Lo que pasa es que no imaginé al niño malo siendo él mismo el carbón, sino que el carbón que le dejaron al niño malo fue utilizado para quemar los juguetes del niño bueno porque no es justo que uno tenga juguetes y el otro no, sino los dos. Puede que alguno se porte mejor, pero un hijo es un hijo y casi siempre, por no exagerar con el siempre. Le metemos el miedo a los niños de buenos y malos...el juicio es lo que tiene, a veces discrimina, pero a veces es justo. No sé, se me fue la cabeza pensando.
Otro abrazo,
Andri
Muchas gracias a todos por estar ahí.
Bienvenidos, Pato, vittt y José Agustín.
Fuertes abrazos y besos.
qué bella imagen, contiene toda la riqueza propia de lo breve y lo sugerente
Vuelvo, después de releer lo que me deja pensando que podría ser mejor es el título, pero es que es tan difícil intitular!
A mi, los títulos me dan bastantes dolores de cabeza. Si se consigue uno acertado, es el 50% del micro, sobre todo si es hiperbreve.
Un abrazo, Juan.
Justicia poética le llamaría yo. ¿Quién define lo que es bueno y lo que es malo? ¿Quién se atreve?
Saludos
J.
Yo no, desde luego. Pero si tengo mi código de pensamiento y conducta, y juego la partida con él.
Un abrazo, José A.
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